Después de varias peticiones personales de nuestros amigos alfareños, no podíamos dejar sin acabar la labor que empezamos en esta misma localidad al comienzo de la campaña. Nos quedaba un tramo del río Alhama sin limpiar… y ésta era la ocasión.
Esta vez nos acompañaron además una veintena de jóvenes, asistentes a un campo de trabajo organizado por el Instituto Riojano de la Juventud y el propio Ayto. de Alfaro, que puesieron la nota alegre a una provechosa mañana de trabajo.
Gran parte del trabajo hubo que hacerlo desde el cauce, que gracias a Dios bajaba escaso en estas fechas de estío, lo que facilitó notablemente la labor. De hecho casi fue una bendición, poder mojarse y chapotear en esta mañana tan calurosa.
Aunque el tramo estaba menos sucio que otros, sacamos una más que considerable cantidad de residuos, con mucho voluminoso, entre los que destaca una bici enterita y en bastante buen estado, que por supuesto no se tiró a la basura, sino que se la llevó un voluntario para repararla y volver a usarla.
Y la novedad de la jornada vino al terminar: nos esperaba una enorme y sabrosa paella que nuestros cocineros habían preparado con mimo. ¡Para chuparse los dedos! Una pequeña recompensa para nuestros Amigos de los Ríos por su altruísmo y buen humor.
¡Hasta la próxima Alfaro!